CURRICULUM DE IMPACTO

Coordinador de Movimientos de Información Interna
(Office Boy)

Especialista en Logística y distribución de Documentos
(Mensajero)

Coordinador Adjunto de Admisiones y Salidas de personal
(Portero)

Coordinador Oficial de Movimiento Nocturno
(Vigilante)

Experto en Manejo de Materiales
(Bodeguero)

Distribuidor externo de Recursos Humanos VIP
(Chofer de Taxi)

Distribuidor Interno de Recursos Humanos
(Elevadorista)

Especialista en Logística de Energía Combustible
(Despachador de Gasolinera)

Auxiliar de Servicios de Ingeniería Civil
(Albañil)

Subalterno Auxiliar de Servicios de Ingeniería Civil
(Chalán media Cuchara)

Enlace Externo Avanzado en Logística de Documentos
(Mensajero con Moto)

Consultor de Asuntos Generales y No Específicos
(Adivino, Brujo, Lector de Cartas)

Técnico de Mercadeo Dirigido
(Repartidor de Volantes en las Esquinas)

Especialista en Logística de Alimentos
(Mesero)

Experto en Clasificación y Acopio de Perecederos
(Verdulero)

Abastecedor Calificado de Sólidos y Líquidos en Lugares de Alta Concentración
(Vendedor de 'cheves' y fritangas en el estadio)
Terapista Emocional en Centro de 'Salud'
(Cantinero)

Distribuidor Externo de Productos Importados de Alta Rotación

(Vendedor Ambulante)

Técnico en Mantenimiento Sanitario de Caminos Públicos
(Barrendero de Calles)

Experto en 'Freelance'
(Trabaja en lo que Caiga)

Impulsor de Vehículo Distribuidor de Refrigeración
(Paletero)

Especialista en Manejo de Tierras y Plantas
(Jardinero)

Experto Distribuidor de Música y Cinematografía
(Vendedor de Discos Piratas)

Técnico en Voceo y Asistencia Vial colectiva
(Boletero de Microbús y Combi)

Experta en Terapia Visual y Distracción Ocupacional
(Teibolera)

Director General Adjunto de Asuntos sin Importancia
(Diputado)

Experta en Sexología y Terapia Personal
(Prostituta)

Especialista en Mantenimiento de Elementos Motrices
(Bolero)

SIN AMOR

La docilidad sin amor, te hace servil.

La belleza sin amor, te hace ridículo(a).
La sencillez sin amor, te envilece.

La castidad sin amor, te hace orgulloso(a).

La justicia sin amor, te hace implacable.

La amabilidad sin amor, te hace hipócrita.

La amistad sin amor, te hace interesado(a).

La alegría sin amor, te hace un bufón(a).

La inteligencia sin amor, te hace perverso(a).

La agudeza sin amor, te hace agresivo(a).

La diplomacia sin amor, te hace hipócrita.

El éxito sin amor, te hace arrogante.

La riqueza sin amor, te hace avaro(a).

El apostolado sin amor, te da una excusa para lucirte.

La oración sin amor, te hace introvertido(a).
La fe sin amor, te hace fanático(a).
La cruz sin amor, se convierte en tortura.

El trabajo sin amor, te hace esclavo(a).

La autoridad sin amor, te hace tirano(a).

La ley sin amor, te esclaviza.

La política sin amor, te hace ególatra.

La pobreza sin amor, te hace orgulloso(a).

La verdad sin amor, te hace hiriente.

La libertad sin amor, te hace un abusador(a).

La vida sin amor, no tiene sentido...

CUÁNTA RAZÓN TENÍAS PAPÁ

¡Cuánta razón tenías papá!…

Cuándo de niño me dijiste que tenía que ser muy cuidadoso para controlar mi vida. Después crecí sin hacerte caso. Y cuando me creí grande, quise conquistar al mundo saliéndome de la casa porque quería formar un hogar.

¡Cuánta razón tenías papá!…

Recuerdo que te dejé con la palabra en la boca y con los brazos abiertos tratando de detenerme.

¡Cuánta razón tenías papá!…

Me rogaste para  que no dejara la escuela. Me hiciste ver que era fundamental en mi vida para lograr un mejor futuro, pero yo no quise escucharte, me dijiste que la juventud era una etapa que pasaba como un suspiro. Yo cerré mis ojos y mis oídos y me marché. Por eso solamente llegué hasta la secundaria. Mi madre me rogó también que siguiera estudiando y yo les dije a los dos que estaba harto de sus sermones y que por favor me dejaran en paz.

¡Cuánta razón tenías papá!…

Recuerdo que mi madre  decía que no me casara porque estaba confundiendo la atracción física y la pasión, con una responsabilidad de hogar, por eso apenas cumplí la mayoría de edad, me casé sin saber si quiera qué es estar enamorado.

¡Cuánta razón tenías papá!…

Esa mañana intentaste detenerme con lágrimas en los ojos y me dijiste “Algún día serás papá y me vas a entender hijo”. Entonces me enfrenté contigo y te dije “Yo sí voy a ser un buen padre, no voy a fastidiar a mis  hijos, yo voy a dejar que sean felices y los voy a entender como no me entendieron a mí”.

Sí… ¡Cuánta razón tenías papá!

Apenas me sentí libre, corrí a emborracharme con mis amigos hasta desfallecer. Caí en las garras del vicio. Un día desperté tirado en la calle, sucio, maloliente, me atreví a pedir limosna y hasta se me hizo fácil robar.

¡Cuánta razón tenías papá!

Cuando me auguraste que  si yo abandonaba el hogar, mi madre se moriría de tristeza o de pena. Yo me burlé de ti, te grité que si eso sucedía era por tu culpa, por la vida tan estricta que nos dabas, por tu concepto duro de disciplina y la responsabilidad que a regaños nos inculcabas.

Cuánto tiempo tardé en comprender papá, aquellas palabras que me dijiste cuando era niño: “Hijo mío, ¡Cuánto quisiera que no crecieras, para que siempre fueras mi pequeñito!”

Pero ya lo ves papá… Hoy me arrepiento de todo lo que hice. Estoy arrepentido de todas las palabras que te grité. Sí, papá, estoy arrepentido aunque es demasiado tarde, porque ya te fuiste de mi lado.

Hoy, estoy triste, solo, abatido, en un hospital  lleno de angustia esperando noticias de mi hijo que no ha venido a verme. A ese hijo que según yo, iba a educar mejor que tú. Sí papá…yo también tuve un hijo que no supe guiar. Él también se fue de la casa, él también me dejó, se tiró al vicio y hasta me dijo que sería mejor que yo  muriera porque fue a hacer su vida, así como un día quise hacerla yo.

¡Sí!… ¡Cuánta razón  tenías papá!

Hoy lo entiendo. Pero ya pasó mucho tiempo, me costó dolor y sufrimiento hasta que comprendí cuanto, cuanto te amé… pero a pesar de todo y hoy que no estás conmigo te digo con todo mi corazón.

¡CUANTA RAZÓN TENÍAS PAPÁ!

¡¡CUANTA RAZÓN  TENÍAS…PAPÁ!!

REFLEXIÓN: 

No esperemos a que sea demasiado tarde, la vida siempre se cobra nuestros desatinos, nuestros errores. Si tienes a tus padres contigo valóralos, ámalos, respétalos y escucha siempre sus orientaciones y sus consejos, con sus defectos y virtudes ellos anhelan siempre lo mejor para nosotros, no esperes que esa historia se haga realidad en tu vida, recuerda que si aprendemos de los errores de los demás, hay probabilidades de que nos vaya mejor.

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((¯`'·.¸°_«¤´¯`¤»°Escucha esta hermosa historia...MP3°«¤´¯`¤»_°¸.·'´¯))

           

LA DIFERENCIA ENTRE EL QUERER Y EL AMAR

Querer lleva implícita la idea de posesión, “Te quiero para algo”. Para que me acompañes, para que estés conmigo, para que me apoyes, para que me hagas sentir bien. El querer es gozar la compañía de esa persona, apreciarla, sentir un gran cariño, disfrutar cada segundo a su lado, respeto mutuo, etc.

Amar es aceptar tal como es con sus virtudes y defectos… y no tratar de cambiar su esencia de ser, es desearle lo mejor aunque su manera de ser no nos guste, aunque no esté con nosotros ni nos haga sentir bien e incluso no nos apoye. El amar  es un sentimiento altruista y desinteresado.

Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento. Cuando una persona dice que ha sufrido por amor, en realidad ha sufrido por querer, no por amar. Se sufre por apegos. Si realmente se ama, no puede sufrir, pues nada ha esperado del otro. Cuando amamos nos entregamos sin pedir nada a cambio, se da por el simple y puro placer de dar.

El querer viene generalmente del pensamiento

Por lo que es posible controlarlo

El amar viene de lo profundo del corazón

Por lo que no es posible controlarlo.

Decir te quiero puede ser eventual y no involucrar nada… Decir te amo es involucrar un sentimiento profundo.